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Derecho firmamento

 
















Cabalgo senderos
de final sin comienzo anunciado,
era yo  un solitario estertor del rayo
sobre mi Campiña,
dejo mis memorias atrás
dulcera en atisbo mi vena,
hacerte entender
eres runa clave,
eje, pilar y cauce
tu noble influjo,
mañana que nunca te sobreviene,
giro, tenso la cuerda
mi maquinaria helada
reloj mecánico un curso memorable,
que era yo
sinestesia real
tempano soslayado,
mi jardín en el que te sembré
de sortilegio que hechizo procaz,
allá ni la nube
disolvía aquel querer preso,
de nueve venas, razones
heridoras
por las que aposté
sabiendas de perder todo
menos a mi noble gato negro
dilema de aquel
ante el mirlo que puso tres nidos.
Cabalga luna
sobre tu mar de brea
seguirás estela de estrella
lejana que cercana según te sea mirada.
Aspas y molino tras el silo de mi blanca idea,
arquitecta, Musa no me desampares
efluvio ni rienda
de blanca ola,
cual  espuma procaz deseo arrullarte,
cobijarte en noche bella
que no vislumbres miedo
ni de ti misma,
cabalga doncella,
cabalga que a mí encontrarás.
Cabalga Escarlata,
que solo conmigo podrás cabalgar,
fuego en aire,
brea mece pluma
rodeados de saetas en llamas
lucha,
cuanto más arduo torna 
más se multiplican las fuerzas,
solo vencer en firmamento anillado,
subo tu enredadera
este deseo de chincharte
y quitarte cobija,
deseo de susurrarte
y acariciarte
como si velo no hubiese
ir a tomar contigo algún hada verde
en posada de Valparaíso
donde rige d' este valde
puridad en esquema
y sentimiento que arde,
hoy es por ti.
Vendrás Musa a nuestro combate,
acamparé tu voz,
seré surco de dulce embate,
es el destino de tu voz,
un dulce emperar y desesperar,
solo solo me pinté
como se pintó la flor,
pero ni aroma tuve ni tuve color,
busqué rumbo, coraje y advertir,
dentro la irisada mentira
quien no era,
tu dulceza,
tu amor,
tu admiracion,
hazme libre de una vez
tu surco tímido y feroz
tu pira de voz,
dentro la luz,
fuera de la noche, sálvame,
tu gemido,
tu verbo, el beso en interior,
letra tras letra,
oh, nácar de estrella
tú la más bella,
renuevo esta mi sangre dulce dama,
pá ser hoguera de mi rama,
beber de tus pechos
ambrosía del sentir traspuesto,
un flamígero sino avanza
trata de capturarme
estoy orando
mi piel erizas Leannán-Sídhe
aullidos a la luna sempiterna
blande el antaño
busqué desde la noche inmensa
a la profundidad de una cueva
te llamé,
ignota fuiste
mi agua desconocida
de aljibe fuente mi deseo
hoy por hoy
proclamo viva
y áurea esta conexión angelical,
baila, rie juega y mece
ambos argentos astros
nuestros cuerpos
e intelectos insobornables
proclamo apoteosis
magna, clara, invencible
es sólo mi amor por ella
sea quien sea
su letra, su poétrica azada
alzo que abandero
de aquí
a mis nueve reinos
se sabe o no se sabe
final depende de un principio

Mundo retiembla
estoy enamorado
sé sabiendo
ciertamente desconociendo
que la intuyo mi amor eterno,

mi llama pareja gemela.


Miguel Esteban Martínez García
He aquí mi Acta.
a 19-04-2025




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