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Fractal

 


Daba el reloj
nueve astillas de horas,
nueve golpes de sol,
sobre mi azada de monumental tormento;
en tierra,
vi mi hora correr junto un gato negro,
buscando nuevo reposo
para lamer su pelaje
no temí crascitara pues
mi dama graja,
no veré despierto asomarse
la última gota que retiembla
la clepsidra sangrienta,
dormiré más me dije,
sin cuclillo,y sin gato blanco
sobre orilla esparcida,
de monumental tajo
a florido destino, y escaleras a estrellas,
laberintos como sendas surcadas por rosas,
melancolía niña, como caminillos de hormigas soldado
y engranajes moviendo peones por doquiera,
Avanzara visión. Camino lejos de su nombre,
él era el nombre, tierra desnuda brotando
sin escuela.
El espino multitudinario
era diáfano en dolor, repleto
en sed de espinas, palabra mía,
viejo sepulcro de paz celestial
con nubes corvas, y huerto de sombras,
que todo quieren como el humano ser,
ser imagen,
crepúsculo, orgullo y mentira;
ser eso, una paloma de anís
una mañana agitada, 
en fuente de lápida.
Sin los discos morados
pone a girar la musa arquitecta.
Posada en rutilante ciprés centenario.



Förüq castellano Miguel Esteban Martínez García
Lugar UME Guadalajara España
A miércoles 26 enero 2022

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