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Pintor del envés tus sentidos

 




















He de mirar,
así como el aire parte su figura
al osar mirarte,

si embeberte es sideral prestancia,
tu belleza que quiebran ojos pares,
déjame morir en ti,

advenida es nobleza
d' este viejo comunero.
Que virtud fundiera en adivinar males

que arrostran sendas y malos cultivares,
afligido a veces,
mi más oscuro momento avanzo,

fiel, subrepticia subyugada
parco designio,
sobre gente que camina su sino,

sólo a veces, diviso cuan yo, la admiro,
completo solo, cuan astro,
voy flamígero en curso,

destapo a mi señor niebla,
oh vencejo mi tajo,
ya te entraño golondrina azabache;

de esta tierra de nadie,
traigo la flor de Hércules secuencial,
igual a la primera maravilla,

idéntica a la caléndula anterior,
entre zarzales su amor me era,
bravo valiente, válido y firme,

adorar es casarse con un vidrio,
y ver reflejo más allá
de carne y cúspide,

querer es más profuso,
que despertar y verte,
sueño en tangente,

oh única vienes.
que del mundo onírico te entona,
fortuna en almendra rápida fueres,

pregunto su gata ronronea y
baila,
quedaré en espera cual soliloquio.

Festín de Dante
divina comedia
en latencia lo que estuvo los ayes,

oh, simbólico,
de realidad superior
subyacente;

camino fuera la línea disonante,
te entregaré disculpa 
en sombra que florecerme puede,

todo lo que amé antes
hoy encuentro aunque siga sin estar,
memoris mi palpitar,

como pintar la profundidad dentro,
atravesar el Sol fierro,
día por día,

como pintar la manecilla un reloj,
y dar funcionamiento, número y orden,
lo que habita, tras y detrás los sentidos,

una melodía, una caricia,
ungir en miel y besar sus ojos,
como destello sensorial.

Habitar su luz sempiterna,
de luna y cantil eternal,
era yo, gimiendo su acento.


Förüq er-lobo bohemio Esteban

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