Ir al contenido principal

LECHO PARA NOBLE SILENCIO


LECHO PARA NOBLE SILENCIO:


Encontrase siguiera,
novia, amor y mujer
este dolor enjaulado
de amistades perdidas,
de amores no perdurables
de tiempo libre, efímero,
clavado en la tierra
de tumba yerta, perenne y muda.
Toda divina causalidad
soterraña de limpios besos fatales.
Yacija filosa de alma su boca,
cónclave de Mercurio, Júpiter y Atenea,
bajo mansas lindes
se acostó mi espíritu,
ya solivié que desterré
la parca negra y sus alfileres.
Atraje a mi yermo ambrosía
de musa su esencia,
ya afligido serví impetuoso
al solo halo flamígero,
desdén de pocos
sin superior,
ni madre conciencia
acuné mi desdicha
en su melífera ternura.
Patio manso,
con redil cercado mi cordura,
osamenta de luna desciende
a mi ambrosíaca esfinge,
acunada mi parda, honda sepultura,
vine que traigo sus voces difuntas
en el carrizo de Helios,
en las rosas de labios de mi amada,
que acaricia que regenta
la negra sangre afligida en esta espina,
maldita sombra, ay de mí,
sonríe mi noche furtiva,
con lengua maligna.
¡Oh, divinidad superior!
Cubran tu manto de las flores estigias,
y los ríos dejen de llorar
sangre mortal,
la fecunda alegría sea cenit
y dichosa ceñida a tu torso
de mujer fecunda,
a ti te abran mis flores
cada primavera,
¡Oh, esse Veris dilectus tui in melieribus!
Escucha, susurra nuestro silencio,
el tiempo que cerraba mis ojos,
y vestía la flor de opacidad,
con el color todos mis sueños,
buenos malos, no niego,
Abrid por Catulo
los cerrojos que atavían
a su agua de palabra,
hoy, siempre, se escuche mi marjal
de claras hierbas,
fecundando su clara tierra de piel,
de mujer valedera.

El Castellano


Comentarios

Entradas populares de este blog

Oda al caracol silvestre

  Caracol silvestre, caracol serrano. Te escribo caracol del camino enervado ¡Oh tus fauces! Blandas que muerden su estadía alimenticia. Del romero al tomillo, desde la jara resinosa, al brezo flamante. Tu deslizar por el terreno húmedo, de la amapola a la caléndula arvensis con su savia dura. Desde el musgo a la piedra igual a la siguiente; idéntica a la anterior. Oh caracol, judío blanco, oh caracol marrón de todo jardín, caracol estriado la pulcritud de carbono de tu casa, mi casa. Miguel Esteban Martínez García UME unidad media estancia Guadalajara

Pioneer

 

Al Duero

        Duero: Grita mi estupor y cuchillos hieren volteando una boca que la onda mece flameando. Se duerme la costilla en el altiplano enjutado de hayas y fresnos recuerda su geología únicamente saboreada por el soñar de los picos, virginal cuna del Duero con tus curvas en rotonda de castizas fuentes y abrevaderos, dulce azada de agua que bascula el sentir de la enamorada palabra, por cimas tu voz se hace meseta haciendo el amor con los pájaros dormidos, templo y morada de la cepa que a ti te alcanza, agua furtiva corre por tu era y reposa en tu infinita onda, que se riza, que se insinúa en vaporizadas Torres de belleza, que en tu alma anidan, sortilegio de rosa y clavel cenit del dolmen tallado, quién a ti en la vastedad del ser en su pecho te lleva prendido el fuego en fanal hoguera en anchos panales de tus abejas. Cuentan de la vida del chopo tus diez mil espumas, que por sierras tu rúbrica dejas, navegante con alas azules el terreno que jamás te vence, secretos...