Nuevo comienzo

 

Miro el deseo correr
mirarse y posarse,
posarse se posó ya
y tiene objetivo prevalente,
aún así no poder ver,
sólo intuir mordisco,
eje y esculpido mordisco,
baila su cenit en cuerda
violín azur,
un sumun de su vetusta olvidada,
noches de luna creciente
cantada al son de grillos nervios,
no hay límites
para su fiabilidad
de compostura áurea
y broncínea proporción,
largueza que abarca,
superando media d' esta patria
de tierra conejos,
fieles el nuevo comienzo
está adentrando,
trenzo sonetadas 
entorno el arco de luna sola,
fuelle de ganas opera,
rienda encendida
caos flamígero empera
compostura
el demonio tu mente
está dictando,
la profecía mieles, mieses,
rebelión en escuela
del signo azabache,
vamos hijos de insensatez,
arriba ángeles, demonios,
querubines, quimeras,
y todas fieras,
ser fuertes y luchar
como un custodio,
como un Centauro,
el reino está abajo,
en cuatro
la puerta de la eternidad cierro,
en tres, deseo, guarda tu espalda,
en la mansión del trueno
soy centella de mundo soterrado,
destello fugaz
de blanco, purpúreo acaudalado,
cuida tu sangre
tentación no está lejana,
en nueve seis recto al ojo,
profético cundir de la escarlata,
ya no respiraba desprotegida,
izé guardias nocturnales
a su vereda luminosa.


El Inocente
Förüq Miguel Esteban Martínez García