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Grillo en alma








Dime arduo corazón 
presto el secreto tu ser
almíbar y fundición de lunas en mares;
cuestión por qué la piedra no es simiente,
ni la sangre brote de planta leve,
el que muere, muerto tal vez
pero ni es río ni barca de Ares desemboca
en Estridas y umbríos humedales,
dime yo que gimo corazón que es piedra,
me completas al fervor de tus cristalitos amantes,
y sueños que viles, nacen espumantes,
oh al claror de silos granates,
lluvia insobornable dictas,
y se diluye mi alma boca a tramo,
todo lado me completas infausto,
de recoger glorias y las bellezas tu cuerpo imantado,
de flor de pedregal, de raíz, de guijarro,
de elemental halago,
sol, ribera, y zarpazo,
sangre de musgo; vestido y hecho de nuevo,
luna y río que eres yo mismo,
está brillando mi corazón,
frente tu coraza y dorado amor,
siempre recuerda quien ser,
mi rectitud de ala y pluma flamígera,
la noche no sueña bajo,
te empuño alto, alto como una nube
de cuarzo verde.
Lluvia, soga, o frontera un alma cándida,
fúndeme en ti,
sí en tu quilataje extenso,
de sones y trinos,
de marchas e himnos,
vine a besarte,
recuérdame 
por si vuelvo con una flor de Hércules,
para convencerte.





Esteban Förüq castellano

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