Avanza la cicatriz, de una luz, esplendente, mortal, sin forma en materia, bebí su suelo me enarboló como se alista a un jocoso pino, de diente afilado, tanta llaga, tanto humano amor, al rojo su pendiente, abandero su ocaso, y la almendra es perdigón rueda en mejilla beata, postura sin suerte, parlamento de murmurio grave, sueño quizá, o latido amarillo de estrella, sí calor de piel sobre otra piel, fuego y viento, fraudulentos, respirar torno a remota ola, suspiro de ojos, calzando tu expresión de alegría, cristalina de pierna verde y azul en alma, milagro tu voz que ni en porfía me resuena por no tenerla vista, amor, tu pecho sobre océano que es aire, roca canta tu alevosía, ríe al jolgorío, tú que puedes y no vives, haz siempre parezca contrario, bajo muela oxidada y moneda de tres sin razones, vine a traerte mi cesto de rocío de mundo, y rosas, estambres de florestas, encendidas, oh seas mi sol de lágrima azabache, mira dentro mi silencio, afloras través mi vista de cu...
Parnaso devorado mar de sienes ingentes caricias, mísera era ala. Escalé mi dulce yermo y sonrojo acontece fiel de almíbar lira y arpa el serrín de destino, oh tormento jamás yerto, no te necesito, me necesitas fiel de asidero. Va mientras mi barca procurando paz de un conflicto nunca existió. y ella, dudo de su realidad; jamás mil máquinas parirán la Flor. Förüq y Leannán-Sídhe