Ir al contenido principal

Llaga un rayo solar

 






He venido en torno al hijo Trueno
ceñido a diosa Piedad de alborada
quedé bajo el silencio las llanas piedras
y su rocío de Musa del alba
me abrigaba un oro sanguinoso
la nieve erguida;
fundiendo dulces sangres,
abriendo al mundo de misterios
otorgados, esta azul bruma,
cantaba dentro su redil de astros
de un milenario júbilo,
un mar de dichas joviales blandía;
más adelante se alzaría el buque
de los vientos, con mi anhelo sin salida
aquí lloré mi ruina,
por mi corazón, luchaban ambos
frentes, como razón
y locura a galope,
mi cielo es alma de fábula,
y templo de harina, mi espíritu
al solo ímpetu que vive su vértigo.


Förüq castellano Esteban




II
Voy que redimo al rocío la fugaz templanza,
con las virtudes del mercurio trascendente,
su cumbre de hermosura como
nunca la apreciaron, sus piedras
de fuego para el fuego, dicha
de pecho abierto, eterno secreto
de este amor, resplandeciente,
que hermosea repechos, cuevas,
y riberas  fluviales, tú que naciste
del agua, fiebre gimiendo
de hermosa, regalas aroma denso
que respiras fragancia pertinaz
de solísimas sombras, entre
concavidades de ángeles su
hielo prevalente,
avancé tu floresta, y tus campos
fui más allá donde germina
mi admiración cursante, que te amo.



III
Dentro tu azul,
natural elemento hermético
desnuda como la naturaleza,
ya suenan mis trompetas de los
ángeles, numen tu casta saliva
en nuestro beso temperado, escrito,
de latitudes y simientes
inexpugnables,
más de tu gallardía, fue
derramarme a símil de gota
tus mares, acierto es saberte
doncella escarlata al filo tus
bellos colmillos sedientos
de madrugadas espumantes
y lunas de candelabro entre
vitrales hirientes un placer
urdiendo vena y acequia,
de nuestro color sagrado nos da vida.



Förüq castellano Esteban

Comentarios

Entradas populares de este blog

Oda al caracol silvestre

  Caracol silvestre, caracol serrano. Te escribo caracol del camino enervado ¡Oh tus fauces! Blandas que muerden su estadía alimenticia. Del romero al tomillo, desde la jara resinosa, al brezo flamante. Tu deslizar por el terreno húmedo, de la amapola a la caléndula arvensis con su savia dura. Desde el musgo a la piedra igual a la siguiente; idéntica a la anterior. Oh caracol, judío blanco, oh caracol marrón de todo jardín, caracol estriado la pulcritud de carbono de tu casa, mi casa. Miguel Esteban Martínez García UME unidad media estancia Guadalajara

Pioneer

 

Al Duero

        Duero: Grita mi estupor y cuchillos hieren volteando una boca que la onda mece flameando. Se duerme la costilla en el altiplano enjutado de hayas y fresnos recuerda su geología únicamente saboreada por el soñar de los picos, virginal cuna del Duero con tus curvas en rotonda de castizas fuentes y abrevaderos, dulce azada de agua que bascula el sentir de la enamorada palabra, por cimas tu voz se hace meseta haciendo el amor con los pájaros dormidos, templo y morada de la cepa que a ti te alcanza, agua furtiva corre por tu era y reposa en tu infinita onda, que se riza, que se insinúa en vaporizadas Torres de belleza, que en tu alma anidan, sortilegio de rosa y clavel cenit del dolmen tallado, quién a ti en la vastedad del ser en su pecho te lleva prendido el fuego en fanal hoguera en anchos panales de tus abejas. Cuentan de la vida del chopo tus diez mil espumas, que por sierras tu rúbrica dejas, navegante con alas azules el terreno que jamás te vence, secretos...