Ir al contenido principal

Raíz VI

 


RAÍZ VI:
































Te escucho, te escribo raíz
beldades te corroboran,
fuelle de viento solar
marea alza la luna pasajera
que nunca marchó
porque siempre viene de vuelta,
que repleta, linde quieto te llora,
fe de sopor y terneza anclada
me respiras, un estado fragoroso
un sigilo despoblado,
y tu magia me desposee
de nuevo, sobre los lustros nos crearon,
de huella imantada
indeleble tu figura de Paraíso,
me acuesto en tus habitaciones
donde crío y me germinan las malvas estelares,
tu silueta es manantio
mi placer apenas rozo
atónita es tu siembra
deslumbras que me caminan tus pisadas
allá que solitud se desnace
y emana este enjambre
onírico en encumbrarte
vestida de hojas
y tu ser belleza que me explota,
un confín es tu curva
mi recta y estaca
es son de ángel desterrado,
gemiré alto.
allá las cumbres me tornan manadero,
de silencio injertado,
oh, tu verbo,
tu idioma de hoja en suelo,
tu desempeño
me posee, de nuevo sobre los años
que ellos son.
Destello,
tu tenacidad en estela endógena,
simbiótica es mirada a tu letra ardiente,
voy y acampo  tu imagen,
solar es afán.
Solar es poder
te atraviesa y me desdobla,
aterrorízame aparte, no podrás abandonar
ya te dicté condena,
jamás sola, porque vivo,
así sea por segunda vez,
raíz crisol de tus valles,
salvaje canto de la madrugada,
mi grillo de galán de noche
blanca dama de noche su flor estrellada.
¡Oh buena memoria!
Vil consuelo de necios,
habito tu piel,
que no podrás negar;
es de quien la eriza,
no puedo ya creer
mi suerte que viuda es,
ahora es apoteósico designio
mi férrea ventura
de ser tu raíz hermana
todos castos dioses
nos habitan,
como esbozo elucubro
un acorde hermano,
sin esbozo elucubro
que tú feraz raíz salvaje
a rolo te trina este piolo,
Morrigú
te hablo, te canto
te estoy llamando desde el abismo terreno,
soy tu cuervo,
soy tu ahijado
lideras, que se reveló a la creación,
pido tu anillo
pido a tu voz
con una tormenta
rebrillan mis ganas
ruego tu favor
concateno la condena
y re-vencedor la tiniebla
y  sinistrialidad
miedo no me conoce
no me figures prueba mi diosa,
mi amor.


El Castellano, Förüq y L eannán-Sídhe

Comentarios

Entradas populares de este blog

Oda al caracol silvestre

  Caracol silvestre, caracol serrano. Te escribo caracol del camino enervado ¡Oh tus fauces! Blandas que muerden su estadía alimenticia. Del romero al tomillo, desde la jara resinosa, al brezo flamante. Tu deslizar por el terreno húmedo, de la amapola a la caléndula arvensis con su savia dura. Desde el musgo a la piedra igual a la siguiente; idéntica a la anterior. Oh caracol, judío blanco, oh caracol marrón de todo jardín, caracol estriado la pulcritud de carbono de tu casa, mi casa. Miguel Esteban Martínez García UME unidad media estancia Guadalajara

Pioneer

 

Al Duero

        Duero: Grita mi estupor y cuchillos hieren volteando una boca que la onda mece flameando. Se duerme la costilla en el altiplano enjutado de hayas y fresnos recuerda su geología únicamente saboreada por el soñar de los picos, virginal cuna del Duero con tus curvas en rotonda de castizas fuentes y abrevaderos, dulce azada de agua que bascula el sentir de la enamorada palabra, por cimas tu voz se hace meseta haciendo el amor con los pájaros dormidos, templo y morada de la cepa que a ti te alcanza, agua furtiva corre por tu era y reposa en tu infinita onda, que se riza, que se insinúa en vaporizadas Torres de belleza, que en tu alma anidan, sortilegio de rosa y clavel cenit del dolmen tallado, quién a ti en la vastedad del ser en su pecho te lleva prendido el fuego en fanal hoguera en anchos panales de tus abejas. Cuentan de la vida del chopo tus diez mil espumas, que por sierras tu rúbrica dejas, navegante con alas azules el terreno que jamás te vence, secretos...