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Crepita mi arma

 




El camino estaba hecho
sueños deambulaban
la Ebúrnea puerta.

Oh este cuerpo no es mi hogar
duermo en plano tácito
del silencio y su resguardo.

Invadió el dulce tormento
se erigió insurrección
del olmo eterno Ygdrassill.

Esta es mi vida
que amo a fuego y brea,
el faro, la hoguera la ilusión mera.

Todo el destino ardió
quedó a piel y fuego
soy eje, timón, y mando.

Vida asida a cielo terreno,
sangre en tierra
que llamaron gloria.

Fortuna llamaron a salud,
y profundicé
el lenguaje muerto

llamaron poesía.
Como hablan las piedras
y retiembla este hombre.

En el umbral de los dos
pesarán los medios
pesarán los fines, porque te armo.

AUGE 339 El Inocente Förüq

MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA




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