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ARDIDO SON

 








I

Si de mi pasión
se encendió una antorcha
renegada a apagarse
si mi pecho enardecido exclamó
ven, y quédate amor,
yo que amor conozco,
y no conozco sólo de nombre,
lancé mi pena toda,
en una lágrima al río Henares
surca Humanes,
fuentes, pozas y albercas
enmudecieron a su final,
mi pecho fue entonces tan sonoro
como su agua y pesares zarparon
vi del cielo un trueno armonioso
que pavoroso zumbaba
fue mi amor que salió de mi cuerpo
rumbo a encontrarte.


II
Rosa encendida, flamígera
vi abrir entre claveles de ocaso,
y dunas frondosas de azules
espadas, entre luz y clara luna.
Marchan horizontes clausurados,
y culebras avanzan esta penumbra
sin sombra del que camina.
Lóbrega lucía la estrella
lancé mi amor a Musa,
alumbraba mi sendero,
gladiando el monte, reptando sinuoso
oh, de sombra y simiente mía
rosaleda divisaba cuando iba sin
destino, me perdía de noche
por un alumbrado laberinto
conversé con las flores y
con mi amuleto era un dragón,
matinal entre mi tierra castellana.


III
Una verde tierra cristalina,
entre zarzas y la paz que
amanece, de virtud de molinos,
y represalias celtas
a escala de la luna, 
miraba pues el amapol
del Sol, 
y en el valle mis lisonjas
y pavesas, entre aquella loma
toda azur su hora,
rumor de vuelo,
y su lucero rebrota
que ardido florece.
Numen y cantos,
de griegos lares
afina Juno y Lesón
visto su homérico son.



MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
LUGAR CASTILLA ESPAÑA
A 30-04-2024


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