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Providencia

 







I
Lo bien hecho, bien parece,
el ser humano, sujeto,
al hufano bien que su dolor apremia,
cuáles males no has de tener,
si ya has nacido,
el gozo ya no ha de disfrutarse,
cuando ocurre, y ya se ha ido,
vida, que nos da color a sus engaños,
apariencias, no mecen certezas,
a tratarse la verdad jamás,
engaña.
Almas cayesen en pecados,
sepultadas, si por el buen querer,
males nos engañan.
Cosas, como vicios,
la tierra me ha dejado,


II
Placeres y ojos me persiguen,
el mundo me los quiere pagar,
asirme de placeres mundanos,
y mundo de materia, pretenderme;
bien me siento, asido de bellezas, 
buen dormir, y buenas obras,
que pecador, mal dormir asegura,
piedad de verme a humanos dado,
mal mío no procuré.
Si yo he agraviado, a las Furias,
no imploro, fuerte en mí, contigo,
ni avernos temo,
en mi sangre me lavo,
miel de acción, permitir
en gloria, despertar a la belleza.



III
Ponzoñoso no es mi contento,
sí contagioso,
en desatino, sobre la grama,
no consientas mi semejanza,
atinar en lechura,
no deseo asegurar el monte
contrario,
no busco la muerte, ni él mi vida,
padre de oculta providencia,
e hijo de rigor en justicia,
me confieso, Mortal Inmortal,
Vampiro Solar, que parte
y te da corazón hasta su
eterna encomienda,
por un crimen de flores,
meditan pensamientos, y otorgan vivos
colores.




El Inocente Förüq 

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